La búsqueda de productos en Internet se ha convertido en una prioridad a la hora de realizar una compra física. Investigar y comparar productos en la red es algo cada vez más común, aunque el producto no necesariamente se compre online. La capacidad de influencia de lo que vemos en Internet es cada vez mayor y los ratios se multiplican en el caso de las redes sociales, mediante la prescripción de un producto por parte de una persona que conoces y que es digna de tu confianza.
Algunos estudios apuntan a que las ventas de las tiendas físicas generadas gracias a la influencia de Internet son tres veces mayores a las propias ventas online.
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